26 de mayo de 2009

Bougie parfumée



Hueles a jazmín y vainilla, como lo que tengo y lo que nunca compré. Y me encanta cuando sonríes. Porque no sueles hacerlo muy a menudo. Creo generalidades por tu barba y reniego de las clases por el humo fluor de tus orejas. Me creas necesidad cada domingo (repasando el séptimo periódico). Me gusta ser tu niña. Enseñarte menos que tus sumas y conocer a don Quicio. Y a la facilidad para sacarme de él.
Por ti he dejado de pensar en musas y en canciones. He creído en la verdad. Y a está situación le sobra polvo.
Y cocer un par de patatas, que las nuestras ya son puré.

4 comentarios:

Cristian Betelu dijo...

Ya sabes que el olor a vainilla es algo que escasea al igual que los que sabemos sacarte de quicio bien sacado... :P jaja Muy bien escrito!! PRometo actualizarrR!!

Anónimo dijo...

Cuece tres y me das una.

Buen blog!
Saludos desde Cantabria.

luján dijo...

Desatas la escritura, preciosa.

Elisa dijo...

Serás siempre bienvenida por mi territorio blogero(=
..aunque últimamente mi inspiración deja mucho q desear,así q me dedico al "plagio" más q nada.......
Dos cosas
1)me encanta esa foto
2)pero q bien escribes,c**o!!!